El misionero Carlos Rovira blanqueó diálogo con oficialismos de Salta, Neuquén, Río Negro y Chubut, e incluyó a Córdoba y San Juan.
En el marco del febril tramo final de la campaña hacia las elecciones del próximo domingo, crecieron las señales -en voz alta, o por lo bajo- sobre la apuesta desde oficialismos de fuerzas provinciales y de peronismos no kirchneristas en pos de consensuar el armado en el Congreso nacional de un interbloque más amplio y con agenda dura de defensa de los intereses del interior del país.
Dos voces se hicieron oír con claridad en ese contexto en las últimas horas, aunque con distinto grado de detalle y énfasis: la del gobernador cordobés Juan Schiaretti y la del fundador y máximo referente del Frente Renovador de la Concordia Social misionero, Carlos Rovira, ambos ya con historial en materia de bloques propios en el Parlamento.
Desde tierra cordobesa, Schiaretti auguró que “se va a ampliar en el futuro” el actual “Interbloque Federal”, que hoy incluye a los legisladores schiarettistas de Córdoba Federal (aunque no a los misioneros del Frente Renovador de la Concordia, contenidos en otro interbloque: el de Unidad Federal para el Desarrollo).
Por lo que me dicen hay muchos legisladores nacionales que quieren sumarse al interbloque; hay muchos dirigentes del interior que piensan lo mismo que nosotros y no tengo dudas de que tendremos más legisladores porque la solución debe venir desde el interior y con más federalismo”
El mandatario de Hacemos por Córdoba se puso al frente de la campaña en el segundo distrito electoral del país, clave por los 3 senadores y 9 diputados en juego y por el hándicap que muestra Juntos por el Cambio, lo que llevó al gobernador a profundizar su perfil confrontativo en pos de disputarle a esa coalición el extendido voto adverso al kirchnerismo.
“Nos encontramos frente a un proceso electoral que es singular porque nadie tendrá la mayoría; hay un empate de debilidades y se abre una oportunidad para que la voz de las provincias sea escuchada, con una negociación tanto en el Congreso como en la mesa de gobernadores”, arengó en las últimas horas desde Carlos Paz.
En esa línea, fue más explícito Rovira el pasado jueves desde Misiones, en el marco de una conferencia que brindó junto al gobernador Oscar Herrera Ahuad y al intendente de Posadas, Leonardo Stelatto.
“Vamos a crear un bloque neo revisionista, que le dé una nueva característica, y tenemos comunicación y consenso con algunas provincias para defender lo nuestro; hoy el escenario nacional va a quedar bastante contrabalanceado”, dijo, aunque se mostró cauto para proteger el avance de esas conversaciones. “Eso es muy bueno para nosotros los misioneros, por eso el voto debe ser un voto que asegure no a determinado partido sino a la agenda”, recalcó, en referencia a la necesidad de desmarcarse de “las obediencias partidarias” de las fuerzas con terminales nacionales.
Como en el caso del oficialismo cordobés, también en Misiones el espacio gobernante quedó segundo en las PASO ante JxC (aunque por una brecha más chica). Un escenario que los alienta a blandir pergaminos ante sus ciudadanos en materia de firmeza y poderío, de la mano de estrategias en bloque, a la hora de pelear los intereses locales en el Congreso.
Pero Rovira fue más allá que Schiaretti, al mencionar a oficialismos provinciales que participan de las conversaciones.
“He venido conversando con otras realidades: con gente del Norte -Salta-; de la Patagonia -Neuquén, Río Negro, Chubut-; la propia Córdoba, por decir algunas”, reveló. Y dijo que Herrera Ahuad lo “acompañó” en el contacto con otros gobernadores.
Rovira sostuvo además que las conversaciones apuntan a “congeniar una agenda común que logre resultados para cada una de nuestras regiones hoy postergadas” y deslizó -de cara al 2023- que “parte de este consenso también cuenta con figuras que tienen proyección nacional, como el gobernador sanjuanino Sergio Uñac, por decir un caso”.
Fuente: ámbito